Otro aspecto importante, además
del encuadre, es el ángulo desde el que el artista representa el motivo. Es
decir, el sitio desde que el fotógrafo o pintor se sitúa para plasmar lo que
desea representar. Los ángulos más comunes son: frontal, laterales (izquierdo y
derecho), aéreo, picada y contrapicada.
Angulo a nivel o frontal: la imagen se reproduce al nivel del
sujeto-motivo. También se puede decir que no existe angulación. Las tomas
frontales normalmente sirven para dar la sensación de inmovilidad, o bien, que
el fotógrafo o pintor es parte del mismo entorno.
Angulo en picada: la toma del sujeto-motivo se realiza de
arriba abajo. Este tipo de ángulo de visión hace que el sujeto-motivo se vea
más pequeño de lo que realmente es, lo empequeñece y se usa para enfatizar que
es frágil, triste e incluso que se encuentra inmerso en algo grande que lo
rebasa.
Angulo en contrapicada: el punto de
vista de la toma procede de abajo hacia arriba. Este tipo de ángulo de visión
produce la sensación de que el sujeto-motivo se vea más grande de lo que
parece, le dotan de una grandeza, de importancia.
Angulo lateral: la toma se realiza de lado del
sujeto-motivo, en diagonal de izquierda a derecha, o bien, de derecha a
izquierda. Este tipo den ángulo de visión producen en el espectador la
sensación de movimiento. Son muy usadas en cine, vídeos e
historietas.
Imágenes de Internet
Textos de Artes Visuales 1 Ed. Castillo